Dizzy hurricane, little hand grenade ▬ austin's bastards.

¿Qué se puede decir de Austin que no salte a la vista? ¿Que le tiene miedo al Coco, tal vez? ¿Que sus dedos quedan irritados después de cada fiesta por chasquearlos mientras baila? ¿O que simplemente es un niño atrapado en el cuerpo de un joven adulto? Un gran Peter Pan. Aquí les presento al señor Austin Troy Hood, en todo su esplendor, para sus ojos exclusivamente.

Auténtico. Esa es la mejor palabra para describir a Austin. La que de verdad le hace justicia a su forma de ser. Un muchacho fiel a su corazón, a su instinto y sus impulsos. Una persona real, genuina, sin máscaras ni doble cara. Lo que ves es lo que obtienes, no hay nada que ocultar acerca de Austin porque él no se avergüenza de nada que lo caracterice. Está orgulloso de ser quien es, de serle devoto a lo que su mente piensa y quiere y jamás intentará ser alguien que no es. La palabra “falsedad” no entra en su diccionario. Si no puedes aceptarlo como es, tú te lo pierdes. En cambio, si decides aceptar a este pequeño payaso en tu vida, te llevarás las mejores alegrías a casa. Un muchacho que irradia positivismo, que contagia felicidad y picardía, sobre todo picardía. Él no ha dejado de ser un niño ni quiere dejar de serlo jamás, cree que el mundo es más divertido si nunca te rindes ante el sistema que tratan de imponerte. Posee una chispa que hace que se gane el corazón de las personas, pues su encanto es natural y su carisma desborda por cada uno de sus poros.

Gracioso. Gracioso como él solo. Con un par de oraciones o una sola acción, puede hacer que botes leche por la nariz, aún si no la estás tomando. Es un comediante de corazón, ama las risas, en especial si son provocadas por él. Le encanta alegrar a la gente, adora que las personas a su alrededor esté feliz. Tiene un corazón de oro, es una buena persona en toda su esencia y es incapaz de desearle el mal a alguien. Siempre que alguien se intenta meter con él, termina embriagándose a su lado y cantando canciones típicas de borrachos. Divertido como nadie, a su lado es imposible que te aburras o pases un mal rato. Es una máquina de ideas para nuevas actividades y siempre es el alma de toda fiesta. Es el primero llegar y el último en irse. El que llega sin conocer a nadie y se va con cien nuevos mejores amigos. El que baila hasta la última canción y se bebe hasta la última gota. Sociable, simpático, vivaz, una persona con la que realmente quieres pasar el rato, alguien demasiado agradable, de esas personas que no quieres que se vayan de tu lado. Claro, no esperes una caminata tranquila por la playa porque tranquilidad es lo que menos tiene este muchacho.

Hiperactivo. Es imposible que este chico se quede quieto en un lugar o mirando el techo. Siempre necesita estar haciendo algo, sintiéndose útil o simplemente sabiendo que no está desperdiciando el tiempo. Porque él es de los que cree que la vida es un segundo, una estrella fugaz, que en un abrir y cerrar de ojos todo se termina, por lo que vive cada día al máximo, cada minuto como si fuera el último. Un chico que disfruta siendo el centro de atención, no le gusta pasar desapercibido y rara vez lo hace. Tiene una personalidad tan explosiva, tan dinámica y llamativa que es imposible ignorarlo. Una máquina de hablar, siempre está charlando con alguien. Puede mantener conversaciones sobre cualquier tema, no le avergüenza hablar de nada. Es completamente impúdico en todos los aspectos, se desinhibe en cuestión de segundos y entra en confianza fácilmente. Haciendo tonterías es como se gana a las personas. Su ego está un poco elevado, hay que admitir. Es de los que se miran al espejo y sonríen, conformes con quienes son. Le encantan los cumplidos, especialmente si son dirigidos a su espíritu fiestero. Es un fanático de las bromas pesadas y de todo tipo de travesuras. ¿Encontraste un gusano en tu spaghetti? ¿Una mosca en tu hielo? ¿Hormigas en tu cama, tal vez? Austin lo hizo, Austin lo hizo, Austin lo hizo. Es el primero al que acusan cuando algo explota o se incendia “accidentalmente”, siempre ha sido así y siempre lo será. Tiene el alma de un infante y quiere preservarla así. Asegura que será joven eternamente. Es también muy competitivo en los juegos y actúa también como un infante cuando pierde. Si le ganas en un juego, mejor no le hables por un par de horas o podrías amanecer en ropa interior en medio de la ciudad. Él siempre tiene que ganar. Aunque en videojuegos o retos la bronca se le va fácil, un mohín o dos y lo tendrás saltando y bailando por todos lados nuevamente. Perdona con facilidad, no es de guardar rencores ya que cree que la vida es muy corta como para perder tiempo en alguien que no se lo merece. Si lo lastimaste o lo molestaste, simplemente te ignorará y se olvidará de tu existencia. Si le pides disculpas, las aceptará y continuará haciendo como si nada hubiera sucedido. Así de simple es con Austin.

Sí, Austin tiene facilidad para llevarse bien con todo el mundo, pero escoge a sus amigos más cercanos con mucho cuidado. Es fiel, leal y protector, tal vez demasiado. Él daría la vida y más por un amigo sin siquiera pensarlo por un segundo, porque para él no hay nada más importante que la amistad. Jamás traicionaría a alguien que tiene su afecto. Los lazos que crea él, los crea de por vida, por lo que si quieres ser su verdadero amigo, más vale que estés preparado para soportar a este individuo por el resto de tus días, ya que él no se irá a ningún lado.
El sexo es un tema que no le parece delicado en absoluto.  Si quiere tener sexo contigo, te lo hará saber. Le parece que no es algo tan relevante y que hay cosas mucho más íntimas en una relación que el coito. A sus ojos, una pareja demuestra más amor al caminar tomados de la mano que al tener sexo. Para él es algo recreativo, por diversión, sin compromisos. En cambio, si llega a enamorarse, a prepararse porque este chico es capaz de hacer que la Tierra deje de girar por la persona que ama. Atento, dulce, cariñoso y juguetón, que le gusta mostrar su afecto y no tiene vergüenza alguna al llamar a una chica “su novia”. Celoso, sí, muy celoso y territorial. Nadie toca a su chica, nadie. Por su chica y por sus verdaderos amigos, las únicas razones por las que Austin es capaz de irse de puños con alguien. Y es capaz de llevarse unas cuantas victorias a casa cuando se enoja.

A pesar de ser infantil. A pesar de ser inquieto, distraído y desordenado, él tiene algo muy claro: su sueño. Él ansía transformarse en un músico reconocido, algún día. Que futuras generaciones se inspiren en él. Quiere marcar la historia, quiere ser alguien en el mundo de la música y luchará por eso con garras y dientes. Es dedicado, centrado y responsable cuando se trata de la práctica, aunque a muchos les sorprende. Él sueña con grandeza y sabe que hay un solo camino para lograrlo: trabajar duro.